El tiempo todo lo va cambiando.
El tiempo cambia sentires, emociones, percepciones.
El tiempo va derruyendo poco a poco al cuerpo físico.
El tiempo cambia dogmas, valores, principios, tabúes.
El tiempo cuan agua de río debajo del puente nunca es el mismo.
El tiempo hace la vida.
El tiempo va alterando los colores de la vida.
El tiempo pide ser navegado tal cual corre.., sin objeciones.
El tiempo te motiva, te desmotiva.
El tiempo construye, derruye.
El tiempo da vida, da muerte.
El tiempo te derrumba, te levanta.
El tiempo te ilusiona, te desilusiona.
El tiempo te da alegrías, te da tristezas.
El tiempo te agita, te calma.
El tiempo eterno te muestra cuan efímera es la vida.
El tiempo te apega, te desapega.
El tiempo te muestra todo pasa, todo es un momento.
El tiempo te enseña a apreciar, a vivir cada ahora, cada instante, cada momento, cada presente.
El tiempo te enseña no vivir del pasado, no vivir del futuro.
El tiempo te hace más ignorante, más sabio.
El tiempo te enseña a tolerar, comprender más el comportar humano.
El tiempo ocupado en mil quehaceres te externaliza, ahoga tu tiempo vida, más no te internaliza.
El tiempo te enseña a buscar el equilibrio holistico.
El tiempo nunca se detiene, así como la vida nunca para.
El tiempo te enseña que la muerte es vida.
El tiempo enseña el VALOR de la vida ante lo banal, ante lo superfluo, ante los mil adornos, ante los mil quehaceres, ante lo material, ante todo.
El tiempo te impone vivir, ser feliz, ser alegre, ser dichoso ante todo.
El tiempo no te pide seas mártir, desdichado, triste.
El tiempo nos enseña a no llenar nuestro corazón de envidia, rencor, avaricia.., sino de amor, gratitud por todo lo dado.
El tiempo te enseña todo lo que ocurre es vida dinámica.
El tiempo no te pide te detengas, pues él nunca se detiene.
El tiempo te enseña la vida es un mosaico de mil colores, de mil sentires, de mil ilusiones.
Valmore Vivas
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