El primer paso para dominar el ESTRÉS es aprender a relajarnos.
Al relajarte ayudas a tu cuerpo y mente a recuperarse de las prisas y del estrés cotidiano. Se trata de aprender formas para controlar nuestro nivel de activación, técnicas de autocontrol que podemos aprender.
Hay que buscar aquellas actividades que consigan mantenernos en un estado de descanso y bienestar. Además, debemos ser capaces de sacar tiempo cada día para dedicarlo a alguna actividad lúdica y placentera: leer, ir al cine, hacer deporte, escuchar música...
Es fundamental desconectar de las obligaciones cotidianas. Para ello resulta esencial aprender a gestionar el tiempo. Para lograrlo, haz un listado de tareas pendientes, define prioridades y establece el orden para llevarlas a cabo, tratando de respetarlo.
Anónimo
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