Reflexión 1084
Un sendero
Al emprenderlo... ni idea sabemos... que nos toparemos.
Ahí radica la emoción. Ir topandonos con cosas nuevas... ir sintiendolas, viviendolas.
En el sendero... no está permitido pararnos de un todo. Quizás una pausa para descansar, si. Luego, continuar el caminar del sendero.
Pararse, es estancarse, morir... quedarse atrás enterrado, polvo.
La aventura llama al andante. Conocer, aprender, hacer lo aviva, motiva, emociona.
Cada paso... es pastizal, monte, arbustos, valles, bosques, ríos, montaña y mil cosas mas va viendo, oliendo, oyendo, gustando, palpando. Es la vida en todo su sentir.
Atrás, no está permitido regresar. Se dió, se vivió. Solo está permitido morir o vivir. Vivir es no parar. Morir es parar de un todo... los pies ya no dan pasos.
Valmore Vivas
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