La vida más vale a lo largo de ella irla llenando de mucho crecer interno, espiritual...,
pues si solo te dedicas a vestirla de lentejuelas, de adornos, de lo material.., terminará cuan copa de cristal fina.., no llena.., bella a la vista pero muy frágil a la brisa.
El amor, las emociones, el sentir hondas con dinero no se compran, con adornos no se compran.
El dinero, lo material no es capaz de llenar el sentir, las emociones hondas del alma, del espíritu.., estas solo se llenan, se cultivan a lo largo de la vida.., si temprano se toma conciencia de su esencia vital del vivir para lograr la armonía, el equilibrio interno.
La quietud, la calma son esencias para crecer mucho en lo interno, en lo espiritual.
El fortalecimiento interno permite ser bambú en la vida.., flexible para soportar las tormentas, huracanes.., y luego erguirse una vez pasen.
El probarse si en verdad crecistes como BAMBÚ.., es cuando la realidad te enfrenta a tormentas emocionales, sentimentales y eres capaz de soportarlas, enfrentarlas cara a cara.., sin evadirlas, salir de ellas o esperar que pasen y volver a erguirte para continuar la vida.
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