29 octubre 2022

Reflexión 2176

El vellocinio de oro

Era el premio que le decían a los aventureros que encontrarían en el  Nuevo Continente: América para animarlos a sarpar para colonizarlo.

Súper animados a volverse ricos sarpaban.

Llegados al Continente se encontraron con tierras salvajes, inhóspitas... pero la ilusión de conseguir el vellocinio los animaba a penetranse en las profundidades salvajes.

Muchos perecieron ante las adversidades encontraban... los que iban sobreviviendo los alentaba la búsqueda del volverse ricos.

Nunca lo encontraron... pero la esperanza a encontrarlo les daba aliento de vivir hasta lo último su cuerpo aguantará o lo selvático los engullera. 

Moraleja

En el canodromo la presa corriendo delante de los perros los alienta a correr y nunca parar.

El sediento en el desierto a lo lejos ve un lago de agua. A él corre con desespero. Al llegar al lago entre sus manos se desvanece hecho arena. Sin esa ilusión no hubiese tenido el aliento, fuerza de correr. 

Valmore Vivas 

No hay comentarios: