Poema para la vida. Por Eric I. Franicevich

Poema para la vida [Por Eric I. Franicevich]


Vida de mis sueños, vida de mi corazón, una vida muy intensa que disfruto con emoción.


Hoy tengo la bendición de poder vivir, tengo más de lo que necesito para sonreír.


Tan solo debo mirar dentro de mi, observar todo lo que deseo y amar hasta el fin.


Tengo este momento, este instante para ser feliz, pues muy bien amigo mio, aprovechalo y vamos a sonreír.


Que lindo es poder despertar, tener un día más, tener un instante más para respirar. Que lindo es poder contemplar la vida y gozarla sin parar.


La luna esconde secretos, la luna responde a tus preguntas, la luna es testigo del amor de la noche, de los sueños del alma.


El sol nos observa durante el día, nos guiña un ojo y nos contempla con alegría.


Las estrellas llevan mensajes, llevan momentos, llevan instantes, llevan recuerdos, llevan grandes detalles.


El bello cielo que contempla mi húmedo mirar,  es un motivo más para llorar, para sentir esa esencia única, de un amor sin igual.


Hoy tengo la posibilidad de agradecer, la posibilidad de amar, la posibilidad de observar la vida con una mirada especial.


Que linda sensación, que bello sentimiento, que fuertes emociones, recorren a mi mente y a mi cuerpo.


Un día más, un día más... Una nueva oportunidad para empezar, un nuevo momento para disfrutar, un instante muy bello para un corazón con ganas de amar.


Amo la vida con libertad, la dejo fluir, la acepto y trabajo en busca de mis sueños.


Sueños para una vida maravillosa, para un instante sin igual, la energía fluye por mi cuerpo y se intensifica mi forma de amar.


Que mejor que amar con amor, vivir sin temor, y gozar con pasión.


Todo pasa, todo cambia, todo se transforma, todo evoluciona, todo el mundo gira según el pensamiento de las personas.


Fantasías de un corazón enamorado por una vida repleta de agradecimiento y amor, que más puede pedirse, todo esta en mi interior.


Tan solo cerraré mis ojos y diré...


Gracias vida.
Gracias por el amor.
Gracias por los latidos, de mi entusiasmado corazón.