17 julio 2021

Reflexión 1034

Reflexión 1034

Vida eterna

Las personas cuando supeditan su vida terrenal a una recompensa de vida eterna al morir... no viven su vida terrenal... toda ella la supeditan a obtener la recompensa.

Es como un perro... que su amo lo acostumbra a una galleta de su gusto... si hace tal o cual pirueta.

El perro no vive su vida... su libertad... vive sujeto a recibir o no la galleta. No vive para buscar su propia galleta, que unas veces le podrá gustar o no. Con ello aprende a afinar su gusto.

En eso, seguro hay perros que son felices... esperando su recompensa.

Ceder tu energía, poder a otro... real o no... es ceder tu SER... que otro te diga que hacer o no.

Cuan hijo... que sus padres lo críen supeditado a ellos. El hijo nunca dará un paso... si sus padres lo consiente o no. Es un hijo que nunca será el MISMO... capaz de tomar sus propias decisiones, buenas o malas, que le permitirán madurar, evolucionar mental y emocionalmente.

¿Que pasa cuando se mueren sus padres?

Simple, queda sin asidero... perdido en su entorno.

¿Que pasa si en vida terrenal descubre no existe vida eterna al morir?

Simple, desperdició su vida terrenal  creyendo. No la sintió. La vivió dopado, zombi.

Llora, pues no tendrá otra vida terrenal tal cual es.

Valmore Vivas

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