Castillo de Naipes
A través de la vida construimos un castillo... sin darnos cuenta es de naipes.
En cualquier instante de la vida se desmorona.
Mientras lo construimos... animados estamos... creemos las bases son sólidas... las paredes, puertas, ventanas nos resguardan.
Error, craso error... una ventisca no lo derrumba pero un huracán, un terremoto de alta intensidad si lo hace añicos quizas porque a medida que pasa el tiempo todo se va derruyendo poco a poco haciendo débil las juntas de los ladrillos, de las columnas.
El hombre animado se ve mientras lucha, edifica... es la flama que infla su hoguera.
El tiempo solo lo observa, se alegra de su entusiasmo, lo deja hacer... el tiempo con paciencia lo espera a cuando el viento poco a poco lo va derruyendo, lo va haciendo arena... lo va haciendo polvo.
De pronto el hombre... se detiene... mira... y ante sus ojos llorosos, no cristalinos ya... el castillo hecho con tanto sacrificio, tesón, voluntad, insomnio... se derrumba. Era un Castillo de Naipes.
Saludos cordiales,
Valmore Vivas
Amor, Gratitud, Alegría
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