Ser FELIZ..,
muchas veces en nuestra nariz lo tenemos..,
basta apenas bajar la vista a ella..,
pero con valores inculcados..,
andamos siempre con la vista mirando el horizonte LEJANO..,
buscando el vellocino de oro..,
cuando tan pegado a nosotros está y no lo vemos por nuestra ceguera velada por otros.
Y así se nos pasa la vida..,
y el gozo del cual siempre debimos disfrutar..
nunca lo hicimos..,
pues el horizonte lejano..,
a un paso dado..,
se alejaba mil pasos más..,
y siempre se hacia inalcanzable.
Que idiota..,
quien espera la muerte a su lado se pare..,
para que en un instante eterno.. la risa de la que a su lado está..,
lo obligue a bajar la vista..,
y ver su nariz, su dicha deslumbrante..
lo irradia..,
y en un ahogo ya no contenido..,
brota de sus ojos una, dos, tres, muchas lágrimas..
de su llanto..,
ya tardío.
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